23 dic 2015

Bitácora del sueño.

Esta va a ser una entrada desastrosa. Ahora mismo, mi capacidad para sentarme en una computadora está prácticamente encasillada a escribir, escribir y escribir, por ende mis ideas están un poco dispersas respecto a expresarme con el mundo exterior, así que espero no ser tan incoherente aquí.

Hace exactamente tres meses hice un anuncio en el que iba a dedicarme a escribir hasta fin de año. Bueno, estamos a fin de año, por ende, estoy más que complacido de revelar que ya está terminado el manuscrito de mi libro, uno del que no me apeno decir, estoy muy orgulloso. Si bien es apenas el primer borrador (porque todavía faltan varios meses de correcciones) para mí es como ver cumplida la primera etapa de uno de mis sueños más anhelados. 

Muchos podrán decir que escribir un libro en tres meses (y vaya libro, ¡Son casi 600 páginas!) es ridículo, ¿Qué buena historia puede surgir de un tiempo tan corto? la verdad es que esto es algo que vengo cocinando desde hace casi cuatro años, algo que se ha plasmado hasta en mis obras y que ya era tiempo de darle vida con tinta, así que prácticamente, la historia se escribió sola.

Mi escritorio, mi horario, mi organismo, mi vida laboral, ¡todo está hecho un desastre! pero no por desesperación, sino porque no he escatimado esfuerzos para llevar a cabo este sueño. Creo que no tengo palabras para describir el amor y la dedicación que he puesto en este libro, tanto así que próximamente voy a desplazarme al lugar donde se lleva a cabo toda la historia para poder hacer más fieles los detalles de la narración, por ende puedo asegurar que he hecho lo posible para hacer de este libro algo creíble.

Y ahora, creando este mundo, soy capaz de decir que jamás había sido tan feliz.

Sólo quería dedicar una pequeña entrada para decirle a todas esas personas que tan amablemente han estado al pendiente de mi y de mi proyecto, que las cosas van tomando rumbo y muy pronto, estará totalmente listo para buscar una oportunidad de ser publicado. Si bien, sé que esto puede tomar años (o bien, nunca lograrse, ya que tengo entendido que el tipo de temática que manejo es... complicada de digerir), creo que nada podrá igualarse a la satisfacción de ver que, después de once años de escribir en las sombras, finalmente llevo a cabo otro de mis grandes anhelos, que es crear mi propio universo literario.

En cuanto esté listo el manuscrito final, empezaré a publicar un poco sobre de lo que va a tratar, pero de momento, prefiero tener todo oculto bajo el agua por si en algún momento, ocurre algo inesperado. Agradezco enormemente todo su apoyo, las obras artísticas volverán, pero por ahora, estaremos con la nariz en el teclado. ¡Saludos y felices fiestas!